“La revolución acabará barriendo los obstáculos que le impidan avanzar”
Giandomenico Puliti
Entrevista pocos días antes de su asesinato, publicada el 19 de marzo de 2010.
Este sábado 12 de mayo de 2012 en la Casa Bosset, se dieron cita familiares y amigos para realizar Homenaje a quien fuera un hombre y revolucionario ejemplar que dejo huellas imborrables en el ámbito de la política nacional y el desarrollo cultural del Edo. Mérida: D´ Marcantonio Giandomenico Puliti.
Desde sus escritos y acciones ejemplares, Giandomenico fijo posturas firmes e inquebrantables ante realidades y males del proceso político del cual fue militante y defensor; político y ser humano digno para nada complaciente con los desvíos de algunos que pretendieron y pretenden utilizar el proceso revolucionario para apalancar intereses personales, en esa forma caduca de hacer política desde la nefasta herencia partidista que viola y sacrifica los principios revolucionarios: “Frente a la corrupción debemos ser implacables: no olvidemos que ella ha sido componente indisoluble de la sangre que alimenta los tejidos de nuestra sociedad. Debemos erradicarla cueste lo que cueste.”(Giandomenico Puliti en entrevista pocos días antes de su muerte, publicado el 19 de marzo de 2010).
Fue en la madrugada del 8 de mayo del año 2004 cuando una bala certera impregnada de odio y repudio por la transparencia y la verdad revolucionaria, dio muerte al compañero Giandomenico Puliti, llevándose consigo a uno de los hombres más reconocidos en la política merideña y nacional, quien demostró su lucidez, entrega y fervor revolucionario por la lucha de las mayorías, de la justicia social y fiel militante de la Revolución Bolivariana.
Sólo cuatro años después, el 2 de mayo de 2008 es condenado, quien se presume es el autor material de los hechos de ese fatídico episodio que enluta a la ciudad de Mérida y a quienes entregan su causa al proceso revolucionario. Sin embargo, el pueblo todavía hoy, exige justicia por la muerte de Giandomenico Puliti y reclama el encarcelamiento de quienes fueron autores intelectuales de este crimen, no siendo más que esbirros temerosos y cobardes ante el testimonio de la verdad. Así lo señala, Frank Romero, cantante y luchador revolucionario, quien fue parte de esta actividad: “este canto tiene que ser una voz que resuene todas las calles, corazones, conciencias, que sea un canto de protesta, diría yo, porque aun no se ha hecho justicia por el vil asesinato de Giandomenico, y seguiremos cantando, lo seguiremos recordando, este canto tiene que seguir hasta que se haga justicia, ¡se reclama justicia por este vil asesinato!”
El recuerdo y el sentir de su presencia permanente, para quienes fuera referencia política y moral en este proceso bolivariano, mueve a quienes participaron en esta actividad, como nos reseña Rodolfo Urdaneta, Coordinador de la Casa Bosset: “es una actividad especial para alguien muy especial, amigo muy querido que no queremos que se olvide, queremos mantener vivo su pensamiento, su acción y hemos decidido organizar este homenaje, desde la Unidad de Literatura de FUNDECEM y La Casa Bosset...”
Es así, como entre música y discursos espontáneos de los asistentes se conmemoraron 8 años de la desaparición física de este compañero, quien fuera como lo dice su hermano Ivan Puliti: “Extraordinario hermano, claro en sus ideales, incorruptible, humilde, honesto, extraordinario padre, a ocho años lo recordamos como si fuese ayer, sigue vivo en nuestros pensamientos y corazones, más ahora en esta coyuntura, sus artículos e ideas están más presentes que nunca.”
La bala que dio muerte a Giandomenico, es la misma que ha asesinado a cientos de camaradas que dejan su vida buscando la radicalización del cambio social, de quienes se han negado siempre a sucumbir ante los desvíos de la burocracia y el oportunismo, tomando el camino de la dignidad revolucionaria. Así lo manifiesta, Guillermo Altamar, asistente a la actividad: “por la memoria de esos compañeros ni un minuto de silencio, toda una vida de lucha, porque la mejor manera de vengar sus muertes será recorriendo nosotros el camino por la construcción de la sociedad socialista por la que ellos dejaron su sangre”.
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