¡Ésta Marioneta!. Por Auckawari Cañas*

Durante más de 12 años hemos observado como el sector opositor ha mantenido un constante y hasta repetitivo discurso sobre la carencia de libertad de expresión en Venezuela. También tenemos las famosas denuncias por las “injustas” expropiaciones que ha realizado el gobierno del Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, motivados en que “expropiar es robar”. Lo que no nos comentan mucho en las redes de comunicación privada, es que estos se manejan bajo los intereses empresariales de los “venezolanos” más acaudalados.

Analicemos un instante lo siguiente: el estado venezolano posee el 30% de los medios masivos: Venezolana de Televisión (VTV), Tves, Vive Tv, Asamblea Nacional Televisión (ANTV), Correo del Orinoco, Diario Vea, Radio Nacional Bolivariana, entre otros. Los cuales constan en su mayoría de producciones nacionales, informativas, de opinión y alguno que otro programa internacional.

Ahora vamos a la otra parte: el otro 70% de los medios nacionales, son privados y pertenecen a 4 familias y un grupo de medios, que mantuvieron el poder durante muchísimos años en el país y no solo de los medios, sino también de las empresas productoras más importantes y necesarias. Estos poderosos empresarios son: La Familia Cisneros (Fundación Cisneros: Venevisión, El Nacional, Conglomerado FM Center), la Familia Capriles (Cadena Capriles: Canal I, Ultimas Noticias, Cadena de Cines Cinex), Familia Zuloaga (Globovisión), Bloque de Armas (Grupo de Medios que en su haber tienen aproximadamente 26 revistas, Radio Deportes, Meridiano Televisión, Diario 2001 y la red de librerías Las Novedades) y la “hermosa” familia de la empresa más poderosa del mundo: La Iglesia Católica (Vale Tv). Ellos poseen la mayor cantidad de espectadores diarios, lo que les permite realizar un bombardeo constante de alto contenido de propaganda de guerra como vemos día a día en canales de tv y medios impresos privados. Lo cual nos lleva a pensar si estos canales son medios de comunicación o son juguetes para difundir una campaña en vías de las elecciones del 7 de octubre.

Como espectadores y usuarios de las diferentes redes masivas de comunicación, debemos ser críticos y entender que no es un candidato lo que nos ofrece la oposición, sino un títere de los empresarios desesperados por llevar a Venezuela de nuevo a esta oscura y pobre 4ta república. La necesidad de informarnos debe ser tan grande como la de conocer, ver la imagen más grande que está detrás de esta campaña de guerra para hacernos creer que todo va mal y nada está bien, la mente crítica forma sus ideas a partir de sus conocimientos reales, así pues investiguemos,  comprendamos y analicemos. 


*Estudiante de Comunicación Social UBV Mérida - Venezuela